miércoles, 1 de junio de 2011

Aquella monótona música.


Aún podía recordar todas las notas,todas sin olvidar ninguna sola,de todas esas noches de frío en las que sólo podía escuchar el viento y las ramas de los árboles golpeando mi ventana, como si me llamaran para poder entrar en mi habitación y cobijarse por una noche.Pero con todo ese miedo que una niña podía tener esas noches oscuras siempre aparecía aquella monótona música que salía de la habitación de en frente,siempre desde pequeña me había preguntado que podía ser o quien podía recitar esa preciosa canción noche tras noche sin olvidarse de ninguna nota.Pero a la persona que fuera le debo todo porque esa preciosa canción aún está en mis recuerdos, en la que hoy en día,canto en esta curiosa habitación.Día tras día oía la misma canción todas las noches pero un día ceso y nunca mas la oí,preocupada por lo que había podido suceder en esa habitación.Un día sin mas la vi entre abierta y mi curiosidad pudo conmigo y entre a mirar,ahora me encuentro aquí rodeada de preciosos cuadros de Van Gogh o algunos otros de Picasso y varios cuadros de una joven preciosa.En su mirada perdida en el horizonte podía reflejar mucha tristeza que a simple vista era fácil de ver,tenía unos ojos color ceniza y un largo cabello color castaño recogido en una larga treza que parecía no tener fin,cuando de repente me vino una pregunte a al cabeza "¿Podía ser esta joven la chica que recitaba esa música monótona?" En la esquina de este cuadro se podía leer algo en pequeño y ponía así: "Con mucho cariño de tú hermano Jont Cupper" Para: Sara Cupper.

Todo fue cuadrando en mi cabeza tantos años viviendo en este pequeño internado con niños que venían y se iban ,pero de repente empezó a sonar esa bonita y monótona música,era madre no se como lo podía haber averiguado pero lo suponía,había estado toda una vida puerta por puerta a la de mi madre y ella era la joven que recitaba aquella canción para guardarme en las noches frías.De repente alguien movió sigilosamente la puerta y vi entrar a un joven.

"Mamá era igual que tu-dijo el chico mirándome-solo hay que ver con los ojos que observas ese cuadro,mas concretamente como observas a nuestra madres"

Me quedé pensando,oyendo otra vez esa preciosa canción,mi hermano tuvo la suerte de poder oír y ver a nuestra madre.Al tiempo los dos fuimos adoptados por un matrimonio que parecían conocernos de hace mucho tiempo,ellos nos contaron toda la historia de nuestros padres,ellos eran nuestros tíos y vinieron a adoptarnos para acabar con algo que nuestros padres nunca pudieron acabar mi tía nos siguió cantando aquella monótona canción,no tenía la preciosa y dulce voz de mi madre,pero ella era la única persona que me la podía cantar sin olvidarse de ninguna nota y nunca se canso de contármela hasta que mi hermano y yo nos metimos en nuestros pequeños sueños en los que un día espero encontrarme con mi madre y con esta bonita y monótona canción.

No hay comentarios:

Publicar un comentario